Dejad que los niños nos expliquen
lo fácil que es amar,
perdonar,
ser feliz.
Dejad que ellos,
con su alma aun limpia
nos digan cómo vivir,
cómo reír,
cómo sin miedo dormir.
Porque ellos
son sabios,
aun no han tocado la codicia,
ni el odio,
ni el rencor.
©
©
No hay comentarios:
Publicar un comentario