Tendré que convencerme
que la lluvia es solo agua
y no tristeza,
que el tiempo son minutos
y no espera.
Tendré que dejarme mojar
por esas gotas de nubes
para comprobar
que no son lágrimas.
Tendré que dejar
de mirar el reloj
y vivir las horas que pasan.
Tendré que convencerme
que no te abrazo con mi almohada,
que las noches son horas oscuras
para descansar el alma.
©
©
No hay comentarios:
Publicar un comentario