Una fría noche no es la del invierno más crudo,
es la de las sábanas más vacías,
la de media cama sin deshacer,
la de no escuchar otra respiración en la almohada.
Una noche fría es aquella en la que solo palpas tela,
en la que no están tus zapatos al pie de la cama,
es aquella en la que solo duermo,
en la que me despierto y nadie me sonríe.
Una noche fría es aquellas en la que deseo que amanezca.
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